TURQUÍA – LA GUÍA DE VIAJE

Cualquiera que logre hacer a un lado algún prejuicio acerca de ideologías religiosas, descubre que Turquía es un destino fascinante, lleno de gente amistosa y hospitalaria y con una increíble belleza geográfica y arquitectónica.

La ciudad cuenta con muchísimas atracciones turísticas que van desde palacios, mezquitas y estructuras de fama mundial, un sin fin de tiendas (como ejemplos el Gran Bazaar y el Bazaar de las Especias), múltiples casas de té y café y bares de narguile. En la impactante Estambul verás reflejadas las diferentes influencias culturales de todos los imperios que la gobernaron.

Situada en el borde de Europa, Turquía une este continente con Asia, escondiendo capas y capas de antiguas épocas que conforman su cultura, aromas y colores y en donde cada sabor cuenta una historia repleta de sensaciones que invitan al disfrute y a la relajación. En resumen, mientras más conoces Estambul, más te enamorarás de ella.

LO QUE DEBES TENER EN CUENTA ANTES DE VISITAR TURQUÍA

• Si es tu primera vez en Turquía, te recomendaría dediques a Estambul una estadía mínima de 4 días, para que puedas percibir su esencia antigua, pero también disfrutar su cara moderna. Es una ciudad impresionante y de seguro te dejará con ganas de más.
• Probablemente requieras una visa que generalmente se puede solicitar online. Para información veraz deberías consultar la web de su Ministerio de Asuntos Exteriores, o ponerte en contacto con el Consulado Turco de tu país. No confíes en ningún otro lugar para informarte pues algunos sitios web suelen cobrar y no brindan un servicio adicional.
• Las personas que poseen pasaporte Schengen de la Unión Europea no necesitan visa y para los residentes de USA o Gran Bretaña la visa de 90 días tiene un costo de $20.00 dólares. En la web oficial o en el Consulado podrás consultar sobre los requerimientos y el costo según tu país.
• Mientras dure tu estadía en Turquía, mantén contigo en todo momento tu visa (cuya duración iniciará el día que llegues) así como una foto de la misma en tu celular.
• En los sitios webs oficiales podrás consultar sobre la posibilidad de llegar al aeropuerto de Ataturk sin visa y solicitarla allí mismo en la Oficina de Visas lo que algunas veces (en teoría) es permitido.
• En Estambul existen 3 aeropuertos: El Atatürk (en el lado europeo de la ciudad) es donde llegan la mayoría de los aviones y está situado aproximadamente a 20 kms. del centro. El aeropuerto de Sabiha Gökcen (en el lado asiático de Estambul) y por último el Hazerfen, que es un aeropuerto privado.
• El metro es la forma más económica de salir o llegar al aeropuerto y la línea M1 es la que lo conecta con el centro de la ciudad.
• El aeropuerto de Atatürk está siempre llenísimo y debido a ello los controles son estrictos, por lo que a la hora de salir deberás pasar por una verificación de seguridad justo antes de entrar en la terminal, luego uno antes del control de pasaportes y un último en la puerta de embarque.
• Salir del país se torna mucho más lento que entrar, por lo que debes tener en cuenta eso para organizarte y llegar muy temprano al aeropuerto y poder pasar a tiempo todos los controles.
• A excepción de las zonas turísticas Estambul es muy barato, pero el aeropuerto de Atatürk es carísimo (sobre todo en las tiendas duty free), por lo que no debes dejar para última hora las compras de regalos pues te podrías arrepentir.
• El clima de Estambul en verano es húmedo y caluroso, con fríos y húmedos inviernos (con nieve ocasional).
  En el verano la temperatura promedio está alrededor de los 27°C durante el día y los 18°C de noche (con unos niveles de humedad relativa bastante altos) y sus días más calientes pueden ser hasta de 35°C.
• La Lira Turca (TL) es la moneda local y tratar de comprarla antes de salir de tu país no es buena idea (puede resultar caro). En casi cualquier parte de Turquía puedes cambiar dólares o euros sin ningún problema pues son las monedas más fáciles de convertir y con las mejores tarifas.
• Es una buenísima idea comprar la tarjeta llamada Istanbulkart en una de las muchas máquinas automáticas que se encuentran por toda la ciudad, pues es aceptada en todos los transportes públicos, incluyendo los barcos y además es recargable.
• El metro de Estambul (al igual que el tranvía) abre a las 6 de la mañana y cierra a medianoche, con una frecuencia de llegada de 5 a 10 minutos.
• Si vas a quedarte varios días en Estambul y vas a utilizar frecuentemente el transporte público, es más conveniente comprar la tarjeta Istanbulkart de la que hablamos antes. Si sólo estarás un breve tiempo en la ciudad, es más fácil pagar cada trayecto de forma individual con un jeton, que se puede comprar en las estaciones del metro.
• Los cajeros automáticos se encuentran por todas partes pero no sólo debes confiar en usar tu tarjeta como tu única fuente para conseguir dinero pues podrías encontrarte con una máquina que no acepte tu tarjeta.
• En el centro de Estambul es donde mejores tarifas de cambio de moneda conseguirás (en el aeropuerto son muchísimo más caras).
  Aunque en la mayoría de los establecimientos aceptan tarjetas de crédito, lleva algo de efectivo siempre por cualquier cosa pues, especialmente en el área del Gran Bazar, los vendedores ambulantes y las pequeñas tiendas probablemente no tendrán esta facilidad.
• Los cheques viajeros no son recomendables pues la gran mayoría de los establecimientos no los aceptan y las oficinas autorizadas para cambiarlos casi siempre tienen filas de espera muy largas.
• Los locales son muy amables y si te esfuerzas en aprender un poco su idioma hasta podrías ser invitado a tomar té o café turco con alguna familia.
• Aunque la gran parte del tiempo encontrarás gente muy amistosa y acogedora, algunas veces los turcos pueden ser demasiado “amigables”, sobre todo si eres mujer y viajas sola (algunas veces hasta pueden seguirte un buen trecho).
  La mayor parte del tiempo son inofensivos pero lo mejor es permanecer indiferente y dejar muy en claro que no tienes interés.
• Hay mucha variedad en la oferta de hospedaje en Estambul. Si puedes darte el lujo de elegir, los hoteles ubicados en la Plaza de Sultanahmet son excelentes, con un número reducido de habitaciones (unas 20 aproximadamente) y con un ambiente muy familiar. Cerca se encuentran sitios de mucho interés turístico como la Mezquita Azul y Santa Sofía.
• En la zona más moderna de la ciudad se encuentran los grandes hoteles, cercanos a la Plaza Taksim.
  Y cerca de los bazares (Gran Bazar y Bazar de las Especias) también hay lugares con buen ambiente y están cerca de Sultanahmet.
  Los hostales también son una opción para hospedarse en la ciudad, donde podrás encontrar lugares de buena calidad con precios desde 10 euros por cama.

• Si buscas ropa de imitación de marcas reconocidas, en Estambul podrás encontrarla en una calle llamada Cadircilar Caddesi, cercana al Gran Bazaar
• Si eres amante de la comida, los ricos dulces, el café y el té, Estambul es tu paraíso pues sus calles están repletas de puestos de Kebab, acogedores restaurantes, cafeterías y casas de té. De tantos sabores entre sus especias e ingredientes, la comida turca merece un artículo entero sólo para enumerarlos.
• Trata de probarlo todo aprovechando que los precios de la comida en Turquía (incluso en un muy buen restaurante) no son caros. En la calle Istiklal y por la Plaza Taksim podrás encontrar restaurantes donde comen muchos locales y podrás probar diferentes platos, incluyendo el tradicional baklava con helado.
• Tal como los artículos para regalos y otros, la comida en el aeropuerto puede costar muchísimo más que en la ciudad, por lo que a la hora de partir es buena idea comprar comida antes de salir para el aeropuerto ya que los procesos de seguridad en la salida pueden demorar.
• Como en la mayoría de los países de Europa y sobre todo en las zonas turísticas, deberás pagar por el uso de baños públicos (cuestan aproximadamente 1 TL) y solo aceptan monedas.
• En muchos hoteles, restaurantes y museos existen inodoros con estilo occidental, pero también encontrarás algunos modelos a la usanza turca (sentadillas). Te recomiendo vaciar los bolsillos de carteras y otros objetos por adelantado.
• Por lo general hay un pequeño chorro de agua justo al lado de los inodoros, pero te aconsejo llevar papel higiénico y dinero en monedas. También son muy recomendables las toallitas húmedas desechables.
• Estambul posee un muy buen sistema de transporte público, por lo que moverte de un lado a otro será bastante fácil si usas este método.
  No importa en qué te traslades pues tanto el metro, teleférico, autobuses e incluso el ferry, pueden ser pagados con la Istanbulkart (de la que te hablé más arriba). El transporte público en la ciudad es muy seguro y conveniente y por este medio puedes llegar a la mayoría de los lugares turísticos.

• A pesar de todas las ventajas que tiene el transporte público, también puedes disfrutar de Estambul caminando. La ciudad cuenta con una gran arquitectura (muchas veces en lugares ocultos) y explorarla a pie es una gran oportunidad para que disfrutes su verdadera esencia y conozcas de manera más íntima a sus locales.
• No aceptes ofertas de taxistas para visitar las atracciones turísticas con una tarifa “todo incluido”. Es seguro que van a cobrarte muchísimo más de lo que realmente cuesta y asegúrate de que el taxímetro está encendido a la hora de subir al vehículo.
• En cuanto a tu ropa, puedes usar lo que llevarías a cualquier otra ciudad de Europa, con la excepción de las visitas a las mezquitas o lugares religiosos y en algunos de estos sitios hay personas en la entrada que se encargan de prestarle accesorios y vestimenta apropiada a los turistas.
• Mientras que las grandes ciudades en Turquía pueden ser cosmopolitas, en las comunidades rurales aún se conservan costumbres tradicionales por lo que deberías vestirte para no llamar la atención, sobre todo si eres mujer.
  Pero incluso en los pueblos chicos, la gente es muy atenta con los extranjeros y lo único que debes tener en cuenta es cubrir tus rodillas (y las mujeres tapar además su cabello con un velo o bufanda) al visitar sitios religiosos.

• Tal como en cualquier otra ciudad llena de gente, es buena idea tener cuidado con tus pertenencias y asegúrate de no dejarlos a la mano en los buses, metro o en los taxis compartidos.
  Si te gustan las compras, Estambul es tu lugar soñado pues sus calles están llenas de tiendas y bazares, en los que es posible negociar!

• En comparación con otras ciudades europeas, Estambul es barato y en el Gran Bazar, en el Bazar de las Especias y en los mercaditos callejeros, podrás pasar un tiempo increíble y muy divertido ya que los vendedores no te van a ofrecer la mercancía a los mismos precios que a los locales. Debido a ello, si eres bueno en las negociaciones y te gusta, habrás llegado al paraíso pero, si eres poco experto y tímido negociando, tú serás para los vendedores como haberse sacado la lotería.
  Ten muy presente que si eres buen negociador, podrás obtener hasta un 50% de descuento del precio en el área del Gran Bazar.
  Si hablamos de las comunicaciones, si quieres comprar una tarjeta SIM turca para utilizarla en tu teléfono móvil por más de 15 días, debes registrar tu teléfono. Si pasado ese tiempo tu teléfono no ha sido registrado, quedará bloqueado para ser utilizado con cualquier tarjeta turca.

• Si quieres evitar todo este trámite y mantenerte conectado durante tu estadía, puedes alquilar un WiFi móvil con alldaywifi.com y a mejor precio que una tarjeta SIM. Este proveedor ofrece data ilimitada por períodos cortos de tiempo a los visitantes.

A PASO LENTO POR ESTAMBUL

Por: Santiago Ortega Arango

En una ciudad de quince millones de personas, que además es el punto de conexión entre dos continentes, es fácil caer en el ritmo frenético de la metrópolis.

Pero Estambul también se puede vivir a un paso más lento, uno que permita entender esa ciudad que es Europa y el Medio Oriente al mismo tiempo, pero sin ser ninguna de las dos cosas completamente.

En un par de días se podría hacer un recorrido rápido: maravillarse en Santa Sofía y en la Mezquita azul, tomar una panorámica desde la Torre Galata, comer un plato de cordero con especias y recorrer el Gran Bazar en busca de bufandas. Estos dos días serían inolvidables, y por sí solos serían un muy buen viaje.

Así, uno puede tomarse el tiempo de caminar entre calles que parecen de una ciudad mediterránea pero en las cuales, como de la nada, aparece una mezquita, un palacio otomano o un pequeño callejón con olor a tabaco caramelizado.

EL BÓSFORO

El Bósforo, el cuerpo de agua que separa a Europa de Asia, es lo que define a Estambul. La ciudad se desarrolló a los bordes del mismo, y hoy en día sigue siendo parte de la vida diaria de sus habitantes.

A lo largo de las orillas del Bósforo hay pequeños parques, y desde una banca es común ver pescadores en sus orillas y grandes barcos cargueros que van desde el mediterráneo hasta el mar negro.

Si bien las mayores atracciones turísticas se encuentran en el lado Europeo, ningún viaje a Estambul está completo si no se cruza el Bósforo. En el lado asiático se encuentra una Estambul más cotidiana, llena de buenos restaurantes, con una zona comercial importante y un parque lineal de varios kilómetros al borde del mar, perfecto para un picnic o para recorrerlo un día en bicicleta.

El viaje al lado asiático puede hacerse en carro o en un metro subterráneo, pero no hay mejor sensación que cruzar como hace desde siglos atrás: en ferry.

EL FERRY

Viajar en barco desacelera un poco el ritmo de la vida y convierte un viaje rutinario en un placer despacioso.

Cruzar el Bósforo son aproximadamente 25 minutos viendo las torres de las mezquitas, las colinas urbanizadas de la ciudad y otros barcos y veleros que transitan. Es estratégico tomarlo en las horas de la tarde y garantizar una primera fila para ver el atardecer turco acompañado de un té chai.

El ferry también es la mejor forma de andar por el Cuerno de Oro, un cuerpo de agua al lado del Bósforo, que atraviesa el corazón de Estambul y ofrece vistas únicas de la ciudad, pasando por los barrios más antiguos, los fantasmas de sus astilleros abandonados e incluso un submarino soviético convertido en una atracción de museo.

Los ferris llegan a unas terminales donde ríos de personas continúan su viaje en un bus o tranvía. Por esta razón, estos sitios se convierten en lugares insuperables para la comida callejera.

Si Nueva York es impensable sin el perro caliente, Estambul no sería lo mismo sin el balik ekmek, un sánduche de pescado asado con cebolla, lechuga y especias. Otras opciones incluyen mazorcas y castañas asadas, pan con nutella o queso crema y los mejillones rellenos de arroz, una verdadera delicia del tamaño de un bocado.

Un poco más adentrado en la ciudad el rey de la comida callejera es el kebab, carne de res o pollo que se cocina en un asador vertical y que es tan popular que ya fue exportada a muchos lugares del mundo.

LAS MEZQUITAS

Unos días en Estambul permiten conocer joyas que se le escapan a los turistas afanados. Cada mezquita tiene su encanto particular, desde las que son grandes e imponentes hasta las íntimas y pequeñas, pero todas son un lugar perfecto para parar un rato a sentarse y descansar.

A las mezquitas se entra sin zapatos, los hombres deben entrar de pantalón y las mujeres de falda larga y con la cabeza cubierta, entonces para recorrerlas en un día de verano es muy útil llevar unas pashminas para cubrirse temporalmente y entrar.

LOS MERCADOS

No hay nada más medio oriental que un mercado, por eso un recorrido rápido no les hace mucha justicia.

Allá se pueden encontrar desde baratijas hasta joyas de cientos de miles de euros, pasando por lámparas, telas, artesanías, ropa y electrónicos importados. Pero si hay algo imperdible en el Gran Bazar y en el Mercado de las Especias son las montañas de condimentos y té, y parar a probar las turkish delight, un caramelo a base de miel y nueces con cientos de sabores distintos. Cualquiera de estas tres cosas se convierte en un regalo perfecto para quienes no pudieron viajar.

Porque para quien viaja a Estambul, no es necesario traer nada de vuelta. Es suficiente el recuerdo del olor a castañas asadas y tabaco acaramelado, y la imagen de los inmejorables atardeceres del Bósforo.

¿QUÉ VER EN ESTAMBUL?

Turquía es mágico, pero una visita no planificada, puede resultar abrumadora. En este itinerario de 4 días en Estambul, te enseñaremos a sacar el mayor provecho a una corta visita a esta increíble ciudad. 

Lo ideal sería poder dedicarle un par de semanas para recorrerla con calma, pero no por eso debemos desaprovechar una corta parada.

Te detallamos un itinerario con horarios (basado en distancias) para que le saques el mayor provecho a tu tiempo. Si tienes más de 4 días, puedes hacer este itinerario a paso lento, dedicándole más tiempo a cada atracción.

ITINERARIO DE VIAJE – ESTAMBUL EN 4 DÍAS

Nota: dependiendo de la época del año es posible que requieras hacerle algunas modificaciones a este itinerario.

ESTAMBUL – ITINERARIO DÍA 1

• 9:00 a.m.
  Palacio de Dolmabahçe
  Duración del recorrido: 1 hora y 30 minutos

• 10:55 a.m.
  Avenida Istiklal
  Duración del recorrido: 1 hora

• 12:15 p.m.
  Museo de Arte Moderno de Estambul
  Duración del recorrido: 1 hora y 30 minutos

• 2:05 p.m.
  Torre de Gálata
  Duración del recorrido: 1 hora

• 3:25 p.m.
  Puente de Gálata
  Duración del recorrido: 1 hora

• 4:35 p.m.
  Bazaar de las Especias
  Duración del recorrido: 1 hora

• 5:35 p.m.
  Mezquita de Rüstem Pasa
  Duración del recorrido: 45 minutos

ESTAMBUL – ITINERARIO DÍA 2

• 9:00 a.m.
  Mezquita Azul
  Duración del recorrido: 45 minutos

• 9:50 a.m.
  Basílica de Santa Sofía
  Duración del recorrido: 1 hora y 30 minutos

• 11:25 a.m.
  Palacio de Topkapi
  Duración del recorrido: 3 horas

• 2:40 p.m.
  Museo Arqueológico de Estambul
  Duración del recorrido: 2 horas y 30 minutos

ESTAMBUL – ITINERARIO DÍA 3

• 9:00 a.m.
  Mezquita Pequeña de Santa Sofía
  Duración del recorrido: 1 hora

• 10:10 a.m.
  Hipódromo de Constantinopla
  Duración del recorrido: 45 minutos

• 10:55 a.m.
  Museo de Arte Turco e Islámico
  Duración del recorrido: 1 hora y 30 minutos

• 12:30 p.m.
  Cisterna Basílica
  Duración del recorrido: 45 minutos

• 1:30 p.
  Gran Bazaar
  Duración del recorrido: 2 horas

• 3:40 p.m.
  Mezquita de Suleiman
  Duración del recorrido: 1 hora

ESTAMBUL – ITINERARIO DÍA 4

• 10:00 a.m.
  Museo Rahmi M. Koç
  Duración del recorrido: 1 hora y 30 minutos

• 12:00 p.m.
  Mezquita de San Salvador de Cora
  Duración del recorrido: 1 hora

• 1:10 p.m.
  Mezquita Mihrimah Sultan
  Duración del recorrido: 45 minutos

• 2:20 p.m.
  Mezquita Fatih
  Duración del recorrido: 45 minutos

• 3:15 p.m.
  Acueducto de Valente
  Duración del recorrido: 30 minutos

• 4:00 p.m.
  Mezquita de Sehzade
  Duración del recorrido: 1 hora

CONSEJOS GENERALES ANTES DE VIAJAR A TURQUÍA O CUALQUIER OTRO DESTINO

• Datos generales: Infórmate lo más que puedas sobre tu próximo destino en lo que se refiere a costumbres, moneda, clima, alimentación, leyes locales y su sistema de transporte y de salud.

• Pasaporte: Asegúrate de que tienes el pasaporte vigente hasta seis meses después de tu salida y que tenga al menos dos páginas en blanco (no todos los destinos exigen este tiempo de validez en el pasaporte, pero es mejor ir por lo seguro).
  Recuerda también sacar varias copias del pasaporte (donde aparece tu nombre, foto y demás datos personales) y guárdalas en diversos lugares (bolso, equipaje e incluso con tu compañero(s) en el caso de que viajes acompañado).
  También es bueno llevar una foto de tu pasaporte en tu celular y dejar una copia con un contacto de emergencia en casa, por cualquier eventualidad.

• Visado: Aunque vayas a un solo destino y no requieres visa para ingresar, asegúrate de que no te van a solicitar este documento en otro lugar, en el caso de que tu vuelo tenga una o más escalas. Ahora cuentas con toda la información en la web para estar al tanto de las normas de visado para cada destino, sólo con introducir los datos de tu pasaporte.